Joey tendrá ascendencia italiana pero su manía de no compartir la comida es más sueca que otra cosa. Una costumbre que muchos desconocíamos pero que acaba de hacerse viral en Reddit, cuando un usuario ha preguntado «¿qué es lo más extraño que has tenido que hacer en casa de alguien debido a su cultura o religión?».
La respuesta más sorprendente la dio otro usuario, contando que cuando era pequeño y estaba en casa de un amigo sueco, la madre le llamó para cenar y él tuvo que esperar en la habitación mientras comían. Algo tan extraño que se ha convertido en hilo viral, con muchos otros confirmando esta costumbre.
“Fui a dormir a casa de un amigo. Cuando me desperté, me dijo que bajaba durante unos minutos. Después de un cuarto de hora bajé a ver qué estaba haciendo y estaban desayunando. Me vio y me dijo que casi había acabado y que ahora subía”.
@SamQari
Es de bien sabidos que no podemos creernos todo lo que leemos en Internet. Por eso en Directo al Paladar han recurrido a una experta que lleva viviendo en Suecia diez años. Ella ha contado como esta conversación se ha hecho también muy viral en el país nórdico, donde no entienden qué le vemos de raro a no ofrecer comida a los invitados.
“No entendían por qué los mediterráneos, asiáticos, africanos, árabes estaban en shock.»
Las razones detrás de esta costumbre
No es por ser rácanos, cutres con la comida o unos glotones que no quieren que les quiten ni un pedacito de su pastel. Hay varias razones culturales detrás de esta práctica, como bien explican los expertos de Directo al Paladar.
Entre ellas destaca la pobreza pasada del país, pero también la sensación de que «ven cualquier ofrecimiento como un contrato vinculante al que en el futuro tendrán que responder. Les pones en un compromiso y les resulta súper violento aceptar» afirma la fuente.
Ni tapeo común ni comidas compartidas
Si no te invitan a cenar cuando estás en su casa, muchísimo menos consideran la posibilidad de comidas comunes y compartidas, como un tapeo o una barbacoa entre amigos. De hecho, esa idea de cena de tapas y aperitivos comienza a calar ahora en sus cabecitas suecas, considerándose algo de hipsters y modernos.